Consumo máximo de oxígeno y eficiencia bruta: amigos, pero solo un poco

Cuando se suele hacer un repaso de los principales factores de rendimiento que afectan a los deportes de resistencia en general y el ciclismo en particular, el consumo máximo de oxígeno (VO2max) y la eficiencia bruta suelen aparecer muy pronto en las conversaciones. Curiosamente, aunque todo el mundo ha oído hablar de estos dos parámetros y conoce su importancia, muy poca gente es consciente del rol real que desempeña cada uno de los dos, y desde luego tampoco es de dominio público la relación inversa que tienen entre ellos.

¿Qué papel desempeñan el VO2max y la eficiencia bruta?

El VO2max (cantidad de oxígeno que un organismo es capaz de procesar por unidad de tiempo y kg de peso) es uno de los mejores marcadores de capacidad cardiorrespiratoria que tiene un organismo. De poco me sirve tener una musculatura caracterizada por fibras híper eficientes si no soy capaz de conseguir que el oxígeno llegue a ellas en la cantidad y velocidad necesarias para la realización del trabajo que se solicita. El VO2max es “algo” entrenable, y digo algo porque no vamos a conseguir con el entrenamiento que un sujeto con unos valores mediocres de partida alcance niveles de la élite. Sí he visto, en casos excepcionales, ganancias extremas (hasta 20 ml/kg/min) pero asociadas a casos con gran pérdida de masa grasa (el VO2max se refleja en valores relativos al peso) y sujetos talentosos y desentrenados. En casos normales una ganancia del 20% de VO2max se considera ya un hito muy grande a nivel de entrenamiento. Teniendo en cuenta todo esto, el VO2max es un buen marcador categorizador. Nos dice en qué categoría de rendimiento nos podemos mover, pero en ningún caso vaticina si vamos a tener éxito en dicha categoría. En definitiva, un valor muy interesante en la captación de talentos, por poner un ejemplo.

La eficiencia bruta, por otro lado, es un marcador más específico siempre y cuando se contextualice. Este parámetro refleja la fracción de energía que nuestro organismo convierte en trabajo mecánico. Al igual que el VO2max, la eficiencia bruta es algo entrenable. En definitiva, independientemente de nuestra “cilindrada”, aquí estamos hablando de cuánto de eficiente es nuestro motor. Este valor, si no va unido al del VO2max, no nos dice gran cosa sobre la proyección del rendimiento. Dicho de otra manera, me es irrelevante que tu motor sea muy eficiente si no es potente. Ahora bien, dentro de una misma categoría de sujetos (VO2max similares), aquellos con una mejor eficiencia bruta tienen más posibilidades de éxito. En ciclistas entrenados es un valor que se suele situar en el 18-23%. Sí, efectivamente, tan solo un quinto de la energía utilizada va a empujar nuestros pedales, una auténtica pena. En resumen, junto a otros parámetros submáximos como el umbral de potencia funcional, máximo estado estable de lactato o primer punto de inflexión en la curva de lactato, es un buen indicador de quién va a ser mejor entre competidores similares.

¿Qué parámetro es más importante?

Esto sería como tener que elegir entre el padre y la madre. Necesitamos buenos valores en ambos para tener éxito, aunque podemos permitirnos tirar un poco más hacia la mediocridad en uno si el otro es absolutamente excepcional, sobre todo en casos de VO2max elevadísimos. Digamos que, grosso modo (y esto merece un artículo separado) una eficiencia bruta proporcionalmente mayor beneficiará más en eventos más largos, y un VO2max proporcionalmente mayor beneficiará más en eventos de menor duración (pero tal como advierto esto es una banalización).

¿Qué relación existe entre ambos?

La relación ligeramente inversa existente entre VO2max y eficiencia bruta es bastante poco conocida. La explicación de este fenómeno es bastante engorrosa sin recurrir a terminología de fisiología: Una mayor fosforilación oxidativa va asociada a mayor producción de especies reactivas de oxígeno. Este fenómeno se puede paliar con una disociación entre la generación de potencial de membrana mitocondrial y su uso para la síntesis de ATP dependiente de mitocondrias (proceso llamado desacople mitocondrial). No obstante, esto requiere un mayor consumo de oxígeno. Simplificado, no puedo pretender ir mejorando ambas paralelamente, y de hecho para un mismo estado de forma normalmente si uno aumenta el otro es probable que disminuya.

A modo de resumen

1- Podemos mejorar el VO2max y la eficiencia bruta con el entrenamiento. Normalmente nos bastará para volvernos más competitivos en nuestra categoría de rendimiento o, en el mejor de los casos, para saltar a la siguiente categoría. Por desgracia no tanto como para pasar de mediocres a fenómenos.

2- El VO2max es un buen indicador de nuestra categoría mientras que la eficiencia bruta nos ayuda a colocarnos en nuestro lugar ya dentro de nuestra “clase”.

3- Según el tipo de prueba objetivo nos puede interesar más una optimización del VO2max o de la eficiencia bruta.

4- Una optimización paralela de ambos parámetros en el largo plazo es, muy probablemente, imposible dada la relación inversa existente entre ellos.

 

Sebastian Sitko

Profesor Facultad de las Ciencias del Deporte de la Universidad de Zaragoza, Doctor en Ciencias del Deporte, Máster en alto rendimiento por el Comité Olímpico Francés, Entrenador Nacional de Ciclismo, Triatlón y Atletismo y entrenador oficial del Colegio Americano de Medicina del Deporte.